EL MUNDO VA A MORIR DE REALIDAD. ABEL GAVIRA SEGOVIA

El mundo va a morir de realidad
A Trudu, crítica en la distancia (con cariño)
Agencia EFE- 12:17 p.m.
Por fin se ha conseguido. Hemos dejado atrás esa etapa oscura y extraña llena de acontecimientos incomprensibles, deseos irrealizables y peticiones desmesuradas. Ahora estamos definitivamente en el período de lo real. Los sueños ya no sirven, incluso dejan de existir. Las esperanzas se basan en datos.

Las ilusiones se tienen con respecto a algo tangible. Abandonamos definitivamente una época de retraso para el ser humano, salimos definitivamente de la Pre-historia.
Aquí y ahora comienza la verdad.Afortunadamente, todos nosotros hemos acordado cambiar la sociedad, hablar de lo que pasa en ella, de lo que se ve en la calle, en la calle de verdad. Vemos el progreso del ser humano, sus grandes construcciones, su vida en la ciudad. Vemos sus problemas: sus peleas, sus enfrentamientos, sus odios. Sabemos por dentro y por fuera los efectos de la droga, nos podemos recrear con las consecuencias de ella.

Observamos con admiración, como si estuviéramos al lado, la miseria en su grado sumo. Sabemos por fin como disfrutan nuestros hijos, qué hacen por la noche y hacia donde van. Por fin, podremos dormir tranquilos. Sabemos cómo es una guerra, saber como se siente cuando se mata a alguien y como debe hacerse. La televisión y el cine dejan la ficción y pasan a ser más reales que la propia vida.

No necesitamos sensaciones, nos la transmiten desde las ondas.Incuso los políticos que tienen que llevarnos al mayor avance en la historia de la Humanidad coinciden con nosotros. Ya se dejan de frases lapidarias, de retórica vacía, de pensamiento utópico. Los presidentes actuales, ayudado por la sabiduría de muchos ex-presidentes que saben lo que dicen, se sitúan en el plano terrenal y usan medidas lógicas y estudiadas para evitar la caída de un sistema que demuestra su fortaleza y que nos ha permitido a las personas de bien vivir en la mejor época que se recuerda.La realidad ha ganado la batalla.

Cada uno debe actuar de acuerdo a lo que es y para aquello que nació. Estamos a un paso de conseguirlo. Tan solo queda cazar las tres manadas de unicornios que se esconden en la Selva Negra, atrapar con red al Fénix del Amazonas y borrar el sendero que sigue el cíclope en su caza semanal por el Caúcaso.

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